El vóley es un deporte muy popular en Tucumán, practicado tanto por hombres como mujeres de todas las edades. Por lo tanto, es conveniente conocer cuáles son las lesiones más frecuentes de esta actividad.
Debido a que el voleibol involucra movimientos repetitivos de arriba, como el remate y el bloqueo, los jugadores son propensos a tener lesiones por uso excesivo del hombro. Además, los jugadores son particularmente susceptibles a las lesiones en los dedos. La primera medida ante una lesión aguda ocurrida durante el entrenamiento o competencia, es contar con un seguro adecuado para accidentes deportivos.
El Dr. Ignacio Dallo, traumatólogo y especialista en medicina del deporte, explica alguna de las lesiones más frecuentes en la práctica de este deporte.
Tendinitis del manguito rotador
Los músculos del manguito de los rotadores son importantes en la generación de la energía necesaria para mover el hombro en los diferentes gestos con los brazos elevados en este deporte. Aunque rara vez se presenten desgarros completos en jugadores jóvenes, estos músculos pueden irritarse o fatigarse con el uso excesivo. A menudo, el descanso y la terapia física puede ser suficiente para resolver el dolor.
Traumatismos de los dedos
Los dedos son vulnerables a las lesiones durante las actividades de voleibol, como el bloqueo, toque de dedos o en el remate. Las lesiones en los dedos más comunes son fracturas, dislocaciones, tendinitis y desgarros de los ligamentos. El tratamiento puede variar significativamente dependiendo del grado de la lesión.
Esguinces de tobillo
Las lesiones de tobillo son las lesiones más comunes en los jugadores de voleibol y responsable de la mayoría de bajas. Los esguinces de tobillo deben ser inmovilizados por el más corto tiempo posible para permitir la rehabilitación más rápida. Por lo general, las lesiones pueden ser tratadas sin cirugía, con refuerzos y rehabilitación. Ocasionalmente, los esguinces de tobillo pueden estar asociados con fracturas sutiles o lesiones del cartílago. Si el dolor continua después de varias semanas debería requerir una mayor evaluación.
Volver a jugar por lo general se permite una vez que los jugadores no tienen dolor y son capaces de soportar su peso corporal sobre los dedos del pie. La cirugía se reserva para las personas con esguinces de tobillo recurrentes que no han respondido a las medidas conservadoras o con fracturas asociadas.
Tendinitis rotuliana
La tendinitis rotuliana es la inflamación del tendón que conecta la rótula con la tibia. Es común en cualquier deportista sometido a actividades de salto contundentes y repetitivas, como en el remate y el bloqueo.
Los brace para el tendón rotuliano son útiles para la descarga de la tensión en el tendón rotuliano y son a menudo la primera línea de tratamiento. Además de la terapia de rehabilitación, es escencial la educación específica del aterrizaje o del salto.
Ligamento Cruzado Anterior (LCA)
Al igual que los esguinces de tobillo, la mayoría de las lesiones del LCA en jugadores de voleibol ocurren cuando un jugador cae torpemente después de saltar. Por lo general, las rupturas del Ligamento Cruzado Anterior están asociados con un “chasquido” y la hinchazón inmediata de la rodilla. El tiempo de recuperación luego de la cirugía es por lo general entre 8 y 12 meses. Hay técnicas de entrenamiento que pueden disminuir el riesgo de lesión del LCA en atletas que saltan, especialmente las mujeres.
Dolor en la espalda baja
La zona lumbar es una fuente común de dolor crónico entre los jugadores de voleibol. La causa de la mayoría de los dolores de espalda baja está relacionada con el músculo o la tensión de los ligamentos. El dolor generalmente se resuelve con el descanso, terapia física y rehabilitación.
Si el dolor lumbar se acompaña de dolor que se irradia hacia las piernas y entumecimiento o debilidad en el pie o el tobillo, la causa puede ser un disco herniado o espondilólisis.
¿Cómo se pueden prevenir las lesiones en el vóley?
- Utilizar técnicas de entrenamiento de fuerzaadecuados para la espalda baja, hombros y piernas.
- Utilice un soporte para el tobillo externo, como una tobillera o cinta adhesiva, para evitar que el tobillo se mueva mas de lo permitido, especialmente si hubo esguince previo.
- Minimizar la cantidad de entrenamiento de saltos sobre superficies duras.
- Calentar los músculos con estiramientos y ejercicios aeróbicos ligeros.
- Asegúrese de enfriar correctamente después de la práctica.
- Si hay dolor, consultar al médico traumatólogo y seguir las instrucciones de tratamiento.
- El atleta debe volver a jugar sólo cuando el alta se concede por un profesional de la salud.
Fuente: drignaciodallo.com.ar